No pierdas tu oportunidad

Más de una vez hemos oido decir, si yo pudiera, que distinto sería todo, creemos que hay cosas que no están al alcance de nuestras manos, y eso es tan solo una creencia, un pensamiento negativo.
Cuando ves pasar las oportunidades sin hacer nada, pensamos que algo no funciona, no existen fórmulas mágicas ni hadas madrinas, todos y cada uno estamos en el mundo para aprender, para evolucionar como seres, lo que nos impide ver las oportunidades, es experimentar el miedo y creer  que nuestras cualidades no se adaptan a ellas.
Las oportunidades se nos presentan unavez en la vida, o tal vez dos, un tren al que debes subir sin esperar al siguiente porque quizas no haya otro y hayas perdido la experiencia de comenzar ese viaje, excudarnos en la comodidad de lo seguro, nos coloca en las limitaciones, esperando a que todo caiga del cielo.
Tomar una decición no resulta fácil, pero negar la posibilidad, es negar que poseemos la opción de mejorar en la vida.
Elimina de tu pensamiento la palabra no puedo por la de quien sabe? Si no lo intento como puedo saber si lo lograré, fija tus metas centrándote en el resultado, no en el proceso, aprovecha que solo tu eres el dueño de tus ilusiones, y sobre todo, no te precipites, toma en cada momento el control , asumiendo en vez de resistiendo, contribuyendo a reducirlos obtáculos.

El viaje al centro de tu ser.

El viaje hacia el interior se hace necesario, y requiere poco esfuerzo, busca el sonido del silencio para familiarizarte con tu otro yo, para ayudarte a despejar las dudas y percibir la esencia, de tu ser, en el silencio hallaras todo aquello que necesites para despojarte de todo lo que te causa dolor, de aquello que de alguna manera impide que vuelvas a ser tu mismo, a encontrar la felicidad y el lugar que te corresponde.
Encontrarte contigo mismo, es dejar de sentir dependencia, es hacerte responsable de tu vida dejando y cortando los lazos que crean dependencia.
Liberarnos es un acto de valentia, un paso hacia la felicidad,resistirnos es caminar hacia atrá.
Para liberar esos lazos debemos abandonar el miedo a la soledad,a la creencia de que necesitamos de alguien para poder caminar, ese es el miedo que hace que podamos actuar ante cualquier circunstancia.